La Palabra de Dios nos dice en I Pe. 3:7 “Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.” (énfasis agregado), deseo compartirles una lista de ideas que como hombres podemos practicar con nuestra esposa y cumplir de manera práctica lo que la Escritura nos está pidiendo.
Conversa
sobre esta lista con tu esposa. Pídele que marque las que son
significativas para ella. Usa la lista como base para aprender sus
puntos de vista. Sé que tu relación será grandemente fortalecida a
medida que aprendan como usar estas sugerencias.
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Comunícate con ella, nunca la dejes fuera.
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Considérala como importante.
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Haz todo lo que puedas para entender sus sentimientos.
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Interésate en sus amigas.
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Pídele frecuentemente su opinión.
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Valora lo que ella dice.
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Deja que sienta tu aprobación y afecto.
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Protégela sobre una base diaria.
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Sé gentil y tierno con ella.
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Desarrolla sentido del humor.
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Evita cambios importante repentinos sin conversarlo y sin darle tiempo para que se adapte.
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Aprende a responder abierta y verbalmente cuando ella quiera comunicarse.
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Consuélala cuando ella está deprimida emocionalmente.Por ejemplo, coloca tus brazos alrededor de ella y sostenla silenciosamente durante unos segundos sin discursear o rebajarla.
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Interésate en lo que ella siente que es importante en la vida.
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Corrígela amable y tiernamente.
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Permítele enseñarte sin ponerte a la defensiva.
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Haz un tiempo especial disponible para ella y tus hijos.
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Sé digno de confianza.
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Dile cosas lindas con frecuencia.
- Sé creativo cuando expreses tu amor, ya sea en palabras
o en acciones.
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